El Estatuto de las Cajas Generales de Ahorro Popular

El conflicto de intereses entre bancos y cajas aceleró la constitución de la organización federal de cajas de ahorros. Los bancos ya habían formado el Consejo Superior Bancario en 1921. El 26 de abril de 1927 se constituye la Federación de Cajas Catalano-Aragonesa-Balear, y la Confederación Española de Cajas de Ahorro Benéficas (CECA), lo hará el 21 de septiembre de 1928.

Durante la República, se promulga el Estatuto de las Cajas Generales de Ahorro Popular, (Decreto de 14 de marzo de 1933), que modifica el de 1929 y que durará hasta la reforma de 1977. Incluye normas referentes a la inscripción de las Cajas en el Registro especial (entonces, a cargo del Ministerio de Trabajo y Previsión). Tal como figura en los estatutos, Caixa Penedès está inscrita con el número 35 en el Registro Especial de Cajas de Ahorro Populares.

En este periodo la Generalitat no tiene competencias sobre las Cajas de ahorro. Esto no se producirá hasta los años ochenta, a pesar de la conflictividad de competencias entre la Generalitat, en que por la Ley 15/1985, de 1 de julio, se crea el Registro de Cajas de Ahorros de Cataluña.

Con el estatuto de 1933, se amplía el abanico de actividades de las cajas, pero siguen prohibidas aún operativas como el descuento de letras de cambio, y las operaciones en divisas.

También en 1933 se crea el Instituto de Crédito de las Cajas Generales de Ahorro Popular, que tiene como objetivos "facilitar las transferencias de fondos entre libretas y cuentas de las cajas confederadas y actuar de entidad compensadora entre ellas, asumir funciones mediadoras para operaciones con valores mobiliarios y operaciones de empréstito de la Administración, actuar como entidad acreedora ante las cajas confederadas y como entidad colaboradora con la obra social de las cajas, y con la posibilidad de emitir cédulas con garantía de los fondos sociales propios ".